Los 4 de Lineker

Ahora quién más o menos vemos la selección ( que no la "roja") como parte de todos( excepto de algún caso perdido que no merece la pena comentar?, pero no siempre ha sido así. Hasta hace unos años lo normal era mirar a la selección en función de su equipo. Mirar con desconfianza y celebrar los éxitos de los jugadores propios, y si me apuras hasta tomar con cierta satisfacción las derrotas si en ellas se podía culpar a algún jugador rival.

Ese era el sentir general cuando el 18 de Febrero de 1987 jugaron el Santiago Bernabéu nuestra selección ante Inglaterra. Eran los grandes años de la quinta del Buitre. Enfrente, el ataque inglés lo dirigía Gary Lineker un hábil goleador. No era un jugador pleno, no era una dechado de técnica, pero tenía un asombroso sentido del gol. En aquellos años jugaba en el Barca.

España empieza ganando con un gol del Buitre( al que al final se añadira el de Ramón, buen delantero del Sevilla malogrado por una lesión), pero entre esos goles de España, Lineker sin remisión, nos destroza y nos hace cuatro. El partido acaba en paliza 2-4.

A ese resultado le sigue una cierta rechifla en el mundo culé: un solo delantero suyo ha barrido a la quinta del buitre. En el partido habían jugado Chendo, Gallego, Míchel, Sanchís,  y Butragueño. En el banquillo estaba Miguel Muñoz que había pertenecido al Real Madrid muchos años como entrenador y jugador.

El escaso público que había acudido, eran en su mayoría madridistas excepto quinientos ingleses que lo disfrutaron por todo lo alto. Todo tuvo un cierto aire podríamos decir de derrota institucional del Real Madrid. Incluso Leo Beenhakker técnico madridista en aquellos días tiene que defenderse en el entrenamiento del real Madrid después del partido: " A ver si voy a tener yo la culpa, por haber tantos madridistas en el equipo...."

Al madridista sólo le quedaba un consuelo, una réplica, si se puede llamar así. Los madridistas eran mayoría en el equipo, pero el portero que encajó aquellos goles fue Zubizarreta compañero de Lineker en el Barcelona por entonces, porque a partir del tercer gol el meta azulgrana fue el centro de las iras de los aficionados, especialmente cuando iba a sacar de puerta.